Cuidándonos para un futuro mejor cierra el 2022 con más de 20 actividades llevadas a cabo por toda España y más de 300 familias apoyadas con materiales para mayores y personas cuidadoras no profesionales.
Los programas de envejecimiento saludable, como su propio nombre indica han gozado de buena salud, y se han llenado de vida durante este año.
Ahora que, cada vez más, las personas mayores aparecen en más medios de comunicación y son más visibles, desde FADEMUR nos sentimos muy felices por haber contribuido a esta visibilización.
Las actividades se han desarrollado por todo el territorio nacional incluyendo las Islas Canarias, con un alcance total de más de 250 personas asistentes en talleres que han variado desde Cuidado de las Cuidadoras en Yebes (Castilla la Mancha), el 17 de octubre, en el Casar de Cáceres y Granja de Torrehermosa, en Extremadura, el 29 de Septiembre, en Agulo (La Gomera), Pautas de vida saludable en Saldaña y Poza de la Vega (Castilla y León) el 20 y 25 de noviembre respectivamente, hasta pautas de vida saludable y actividades que combatan la soledad no deseada en las localidades de Valle de Gran Rey (La Gomera), Tegueste (Tenerife) el 22 de noviembre, Cabezuela del Valle y Rebollar los días, en Extremadura los días 3 y 4 de octubre respectivamente y, cerrando el año, un taller de cuidados para mejorar la salud, la apariencia y la autoestima el martes 13 de diciembre en La Rioja.
Estas actividades han trabajado la prevención de la soledad no deseada en personas mayores, y además de la proporción de información y herramientas facilitadas, se ha hecho fomentando en las actividades una visión intergeneracional.
Creemos que no se puede fomentar la inclusión plena de la población de personas mayores, si nos empeñamos en compartimentar los colectivos que forman las sociedades. El conocimiento, la sensibilización y la participación de los grupos de poblaciones, tiene que venir de la mano de la integración de todos ellos en las actividades propuestas. Si insistimos en diseñar y elaborar actividades, pensadas "sólo" para un colectivo, le estaremos excluyendo de todos los demás.
El trabajo con las personas mayores debe de tener siempre en cuenta a las propias personas mayores, evitando proyectos que las infantilicen, o caigan en un edadismo barnizado de buenas intenciones.
La persona adulta mayor es un valor del medio rural, no sólo porque es, comparativamente la población mayoritaria en estos territorios, si no porque además, son el presente y en este presente es en el que se tiene que construir el futuro. Si a la hora de pensar en los diferentes ámbitos de desarrollo local, se tiene en cuenta a su población de más peso específico, se reducirían muchas de las necesidades no cubiertas en los territorios, como pueden ser problemas de comunicaciones, servicios, accesibilidad, y generación de oportunidades, entre los que se encuentran las de empleo y formación.
Todas las actividades desarrolladas en el programa, así como la participación en ellas de personas expertas en el trabajo con personas cuidadoras y mayores, han podido llevarse a cabo gracias a la subvención con que cuenta el programa, "Cuidándonos para un Futuro Mejor" financiado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030
